El mundo se enfrenta a retos que, por primera vez en la historia, tienen una dimensión global. La emergencia climática es el principal problema que hay que resolver, pero también la crisis energética, las pandemias, la escasez de alimentos o el ascenso de los populismos. Los invitados en el dosier “Un futuro incierto”, del último número de la revista Barcelona Metròpolis, participan en la Bienal de Pensamiento de Barcelona y aportan ideas para reconducir las incertidumbres que angustian a la sociedad actual.

La visión del planeta tal como lo hemos vivido hasta ahora está cambiando radicalmente; los humanos deben tejer una nueva relación con la naturaleza, el clima, los recursos y el resto de habitantes del globo. Las democracias occidentales no se escapan de estas incertidumbres, que adoban el terreno de los populismos y los gobiernos autoritarios. Hay muchos interrogantes que anieblan el futuro más inmediato. Ante la amenaza del fatalismo o el inmovilismo, como reacción, los especialistas del dosier “Un futuro incierto” aportan ideas y respuestas. Publicado en el número 124 de la revista Barcelona Metròpolis, lo introduce la editorial “El futuro no está escrito”, de Milagros Pérez Oliva.

Peter Singer y Yuval Noah Harari abren el dosier con el extracto de una conversación guiada por la neurocientífica Liad Mudrik durante la décima edición del Jerusalem Writers Festival, en el centro cultural Mishkenot, de Jerusalén. La reflexión gira en torno al poder de la responsabilidad individual y del altruismo efectivo como mecanismo de cambio respecto a los otros y al planeta. Por su parte, el filósofo y helenista Pedro Olalla cuestiona la imposición frecuente de relatos oficiales basados en la conveniencia de los poderes. “El desiderátum neoliberal y neocon se ha convertido en un dogma incuestionable falsamente avalado por la ciencia y no solo ha conquistado la política y la ética, sino también el mismo territorio de la verdad.”

Ante las crisis que amenazan a las instituciones democráticas, Chantal Mouffe apuesta por lo que denomina populismo de izquierdas para hacer frente a la hegemonía neoliberal y a los gobiernos autoritarios en Europa. Según la autora, “hace falta establecer una sinergia entre los movimientos sociales y los partidos con el objetivo de construir un ‘pueblo’ y movilizar los afectos comunes hacia la igualdad y la justicia social”. Considerando que la idea de crisis es consustancial a la democracia, Cristina Monge dibuja un marco de mejora, con medidas para gestionar la complejidad y articular una nueva gobernanza multiactor. La democracia y los factores que la amenazan también son el tema del artículo de Manuel Arias Maldonado, desde la perspectiva del ejercicio de la soberanía territorial. “No pueden fundarse nuevos estados todos los fines de semana. Para evitar que las identidades tengan un papel desestabilizador en las democracias constitucionales, debemos contenerlas diseñando con cuidado las instituciones”, afirma.

Dos crisis más, la energética y la climática, llevan a Antonio Turiel a defender el abandono de la idea del crecimiento perpetuo, al que califica de suicida. El planeta es finito, y no puede absorber todos los residuos que generamos ni darnos todos los recursos energéticos que queremos consumir a una velocidad creciente. Desde el ámbito del derecho, Katharina Pistor describe cómo el capitalismo utiliza el sistema jurídico para obtener beneficios al servicio de los intereses privados, aunque los actores decisivos no son ellos, sino sus abogados. Layla Martínez, por su parte, pregona el hecho de asociarse y organizarse con el fin de convertir el miedo en acción política. De otra manera, la ansiedad climática nos podría llevar a una parálisis colectiva y a un fatalismo que nos conducirían sin remedio hacia el desastre. Garantizar que la ciudad ofrece las condiciones de vida necesarias a todos sus habitantes requiere, según defensa Tatiana Bilbao, poner las prácticas de cuidado en el centro y superar el modelo actual pensado únicamente en términos de productividad. Por eso apuesta por la arquitectura como herramienta al servicio de una revolución doméstica que configure nuevos espacios de relaciones entre personas.

¿Qué papel tendrán las nuevas tecnologías en todo este escenario? Los sistemas de inteligencia artificial, cada vez más asequibles, se convertirán en un elemento clave en la toma de decisiones y la gestión de la complejidad urbana, según expone Karma Peiró, que reconoce que el gran reto es conseguir que su incorporación se haga con criterios del humanismo tecnológico y de la gobernanza ética. Cierra el dosier Gabi Martínez con un interrogante: ¿queremos que los animales estén en la ciudad? Para Gabi Martínez, hay que cambiar urgentemente la relación de los humanos con los ecosistemas para mejorar la salud del planeta.

Además, en Barcelona Metròpolis…

Barcelona, confirmada como sede permanente del Mobile World Congress, se consolida como referente mundial para la industria digital. En el reportaje “Las tecnologías digitales, el nuevo motor económico de Barcelona”, Albert Cuesta explica las cuatro líneas de trabajo de la Fundación Mobile World Capital Barcelona (FMWCB): las relaciones entre el mundo académico y las empresas tecnológicas, la creación de empleo vinculada a las TIC, el humanismo tecnológico y el despliegue de la tecnología 5G.

Las entrevistas de este número ponen de relieve dos figuras del ámbito de la cultura. Imma Merino entrevista a Carla Simón, la directora de la película Alcarràs, que, además de los reconocimientos recibidos hasta ahora, ha sido escogida para representar España en los premios Óscar. Por su parte, Maria Palau habla con el mecenas Antoni Vila Casas, que toda su vida ha destinado una parte de su fortuna a proyectos filantrópicos en el ámbito sociosanitario y artístico. Y en la sección “En tránsito”, Mar Galtès hace un retrato de Mike Blackman, artífice del desembarque en Barcelona del ISE, la mayor feria audiovisual del mundo.

“Barcelona, capital del cómic” centra el “Debate de cultura” que se titula “¿Quién le teme (todavía) al manga?”. Montserrat Terrones recoge las opiniones de nueve expertos del sector que cuestionan las numerosas etiquetas que son compatibles con este tipo de publicación. En la sección “Pliego de cultura” también encontrarás el artículo de Josep Lambies “Hacia un rediseño del tejido cultural de la ciudad”, sobre la descentralización de la programación cultural de Barcelona a través de las iniciativas Temporals y Barcelona Distrito Cultural. Y en el apartado de libros destaca la reseña que hace Marc Andreu de Cròniques del fang, en el que el periodista Jaume Fabre rinde homenaje al periodista Josep Maria Huertas Claveria y al periodismo al que dio nombre.

Con el título La belleza es asquerosa, la fotógrafa Tanit Plana invita al lector a hacer una interpretación libre de las imágenes que nos presenta, acompañadas de un texto de Paul B. Preciado: “Lo que llamamos feo es bello y lo que consideramos bello es feo…”. Cierra la revista el relato Triunfo que firma la escritora Aina Gatnau. Las ilustraciones de este cuento, la portada y el dosier de este número son obra de la artista Susana Blasco, que también es autora del cartel de la Bienal de Pensamiento 2022.