Flora lleva más de 40 años de oficio, y desde sus inicios ya se reafirmó su espíritu precursor y autodidacta: se trata de la primera mujer del Estado español que cursó Jardinería y de la fundadora de la primera escuela de arte floral de Cataluña. Desde su taller, trabaja el lenguaje floral, que va más allá de decorar con flores. Flora trabaja sus obras a través de la sabiduría que le ha dado la botánica: cada especie, cada color o aroma es importante para preparar cualquier encargo; las ramas, hojas y un sinfín de materiales se acabarán fusionando en la obra final. El taller emite la misma esencia del trabajo de Flora, nada es un detalle aislado y todo forma parte de un conjunto. Mientras ella se dedica a su labor, la biblioteca invita a sentarse, tomar algo relajante y dejar aflorar nuestra cultura botánica. El jardín es un espacio por descubrir, un oasis donde buscar una silla y dejar que nuestra lectura se fusione con el aroma que se respira, el fluir del agua y la explosión de color del jardín de Flora.