Un horno modernista

El Forn Sarret conserva muchos detalles originales de la época, como el horno giratorio de piedra, donde todavía hoy se cuece el pan artesano, o los cajones de madera donde fermenta la masa. El escaparate y la entrada mantienen la madera y los vitrales modernistas originales, pero han sufrido algunos cambios: se ha perdido el letrero de cristal emplomado, que ahora aparece impreso. En el centro, entre las dos puertas de entrada, hay un gran medallón de cerámica con la imagen de una mujer segando el trigo. Dentro, todavía se puede ver una pintura con el nombre del negocio con caracteres modernistas. El horno ocupa los bajos de un edificio de 1866, obra de Felip Ubach, autor, entre otros, de la antigua fábrica Ricart del Raval de Barcelona.

Un negocio centenario

El Forn Sarret no ha dejado de elaborar y vender pan durante más de un siglo, aunque ha ido cambiando de manos. Los propietarios actuales recuperaron el nombre de la familia que lo abrió, Sarret, en homenaje a los artesanos panaderos de la época. Hoy ofrece una gran variedad de pan y repostería.