La familia Girona formaba parte de una oligarquía burguesa de ascendencia rural que pasó por el comercio y la industria; más tarde se convirtió en aristócrata y emprendió diversos negocios. Al principio del siglo XIX, los Girona compraron numerosos terrenos en Les Corts, zona que disfrutaba de buen clima y mucha agua. En 1857, edificaron la actual Torre Girona. Fue apodada familiarmente con el nombre de El Parque. La torre se componía de una altura, un subterráneo, una planta baja, un primer piso y la buhardilla. El conjunto constaba además de una caseta para el jardinero, un estanque con un molino de viento para el abastecimiento de agua, pabellones chinos y diversas esculturas. En la actualidad, acoge el rectorado de la Universidad Politécnica de Cataluña, así como el Barcelona Supercomputing Centre, un superordenador llamado Mare Nostrum, ubicado en la antigua capilla de la residencia, que se caracteriza por ser uno de los ordenadores más potentes de toda Europa.